David Melrose sigue disfrutando la medalla de plata

Fue todo un debut en el Campeonato Mundial de Curling en Silla de Ruedas para el novato escocés David Melrose. No solo tuvo la oportunidad de competir en su tierra natal de Stirling, Gran Bretaña, sino que fue una parte fundamental del equipo que consiguió la medalla de plata.

"Fue la mejor experiencia deportiva de mi vida", reflexionó con simpleza.  

Melrose apenas comenzó a jugar al curling hace cuatro años pero el deporte lo atrapó rápidamente. Fue llamado para el equipo escocés en agosto y en octubre hizo su debut internacional.

Junto a sus compañeros Aileen Neilson, Hugh Nibloe, Robert McPherson y Gary Logan, Melrose alcanzó las finales en el Mundial en su casa - perdiendo frente a China en una final tensa animada por una multitud de espectadores.

"Creo que la medalla de plata fue un resultado sobresaliente para el equipo", analizó Melrose. "Al entrar al Mundial, todavía estábamos tratando de encajar, tratando de aprender los rasgos de cada uno, cómo avanzar y cómo motivarnos mutuamente".

El primer triunfo de Escocia en la competencia fue en su tercer partido, contra Alemania. Terminaron ganando siete de sus 11 partidos en la round robin y luego vencieron a Noruega, campeón de 2017, en la semifinal.

Jugando en el mayor escenario

Más allá de que Melrose jugó fútbol y golf semiprofesional antes de la parálisis en sus piernas como consecuencia de un accidente en 2010,  él reconoce que todavía se está acostumbrando a ser rotulado como un atleta y a beneficiarse del apoyo por formar parte de un equipo nacional.

"Entrar en el programa ha cambiado totalmente mi forma de vida y mi forma de ver las cosas", declaró. "Cambió mi vida prácticamente en todos sus aspectos".

Desde que se unió al equipo escocés, Melrose se ha centrado en aprender las tácticas de curling. Su estilo de entrega ha cambiado y se está familiarizando con los matices del deporte y aprendiendo cómo controlar un juego.

El encuentro clave para Escocia en el Campeonato Mundial, cree Melrose, fue la semifinal contra Noruega, donde la experiencia de sus compañeros de equipo resultó crucial para impulsar el triunfo por 7-3.

La skip Neilson, Nibloe y McPherson habían ganado bronce en el Campeonato Mundial 2017. Además, compitieron en los Juegos Paralímpicos de Invierno PyeongChang 2018, donde finalizaron en la séptima posición.

"Solamente traté de lanzar y enfocarme en el hecho de que es un tiro que había practicado antes", explicó Melrose sobre su mentalidad en los partidos clave.

De cara al partido por la medalla de oro, Escocia sabía que China, campeón Paralímpico, sería un rival complicado.

"China jugó en gran nivel durante toda la semana y son dignos campeones", analizó Melrose. "Probablemente no jugamos en nuestro mejor nivel. Siento que no jugué todo lo bien que podría haberlo hecho".

"Fue mi primera experiencia en un contexto como ese", agregó. "Es bastante desalentador, pero solo tienes que intentar concentrarte en hacer tus lanzamientos y en tu juego".

Aunque Melrose dice que probablemente se sintió más relajado en la final que en la semifinal porque sabían que una medalla de plata o de oro ya estaba asegurada, admite que aún había presión.

"La plata es buena, pero cuando tenés la oportunidad de llegar a esa instancia querés ganar el oro", dijo.  

El equipo escocés ahora esperará por los Campeonatos Mundiales de los próximos años y, en última instancia, se enfocará en los Juegos Paralímpicos de Invierno Beijing 2022.

"Sabemos el estándar que debemos alcanzar", advirtió Melrose. "No quisiéramos ir allí sin querer competir o sin chances de ganar una medalla".