Hong Kong, potencia de esgrima en silla de ruedas, quiere recuperarse de Tokio 2020

Encabezar el medallero de esgrima en silla de ruedas en los Juegos Paralímpicos Atenas 2004 no fue casualidad para Hong Kong. También quedaron segundos en Beijing 2008 y Londres 2012, ganándose la reputación de potencia de la esgrima en silla de ruedas a principios de este siglo.

"Es la historia", dijo Wong Kam Kau Karl, actual entrenador del equipo nacional de Hong Kong, sobre las claves del éxito del equipo. "Empezamos muy pronto entre todos los países. Al principio del desarrollo de la esgrima en Hong Kong, los entrenadores se esforzaron mucho por desarrollar el deporte y los esgrimistas tenían un buen compromiso. 

"Otra ventaja es que a veces entrenamos con esgrimistas sin discapacidad".

Hong Kong confidencial

Una generación dorada suele llevar a otra. La dos veces atleta Paralímpica Chung Yuen-Ping Irene se inspiró al crecer viendo las medallas de esgrima de Hong Kong en los Juegos y se benefició al recibir apoyo práctico de algunos de los mejores del mundo. Dado que el país se compone principalmente de una gran ciudad, un esgrimista en ciernes podía acceder fácilmente a compañeros de entrenamiento del más alto nivel.

"Me uní a la esgrima en silla de ruedas cuando estaba en la escuela secundaria y aprendí mucho y recibí muchos consejos de los atletas que ya llevaban mucho tiempo practicando la esgrima con buenos resultados", dijo Chung.

"He oído que en lugares como China, los esgrimistas viven en ciudades diferentes y quizá no puedan practicar juntos todos los días, pero en Hong Kong sí podemos. Tenemos más tiempo para entrenar juntos y adquirir más experiencia.

"Cuando empecé a asistir a las clases de esgrima, me pareció interesante y quería ser una de las atletas que algún día pudieran conseguir una medalla. Nos enseñaban todo sin ocultarnos nada, así que sentí que algún día podría estar en su escenario y eso me hizo querer practicar más, a diario.

"No soy muy alta, no tengo ventaja, sobre todo cuando me enfrento a chicas europeas, que son más altas que yo por una cabeza o más. A veces me siento triste por eso, pero cuando hablo con mi entrenador y mis compañeras me dicen mucho sobre cómo encontrar algunas estrategias o técnicas, y que yo también puedo competir. 

"En este equipo tendré mucha motivación e inspiración para convertirme en mejor atleta y esgrimista".

Fin de la racha dorada

La esgrima en silla de ruedas despegó en Hong Kong en los años 70, cuando se fundó la asociación de este deporte. 

"Es un cambio natural que hayamos acelerado desde la base hasta el nivel de élite, y nuestra dirección pasa por desarrollar el nivel de equipo", dijo Yuli Wong, portavoz de la federación de esgrima en silla de ruedas de Hong Kong.

"Contratamos a entrenadores sin discapacidad a tiempo completo. Y en aquel momento, el rendimiento iba muy bien".

Entre los 11 Para deportes en los que se centra Hong Kong, la esgrima en silla de ruedas es el tercero más popular, después de la boccia y el tenis de mesa.

En Tokio 2020, sin embargo, las cosas no fueron según lo previsto. Por primera vez en unos Juegos Paralímpicos, Hong Kong acabó sin medallas. Según Karl Wong, que asumió el cargo de entrenador del equipo nacional en 2018, los cierres precipitados por la pandemia de Covid-19 tuvieron un gran impacto.

"Esos dos o tres años fueron muy difíciles", dijo. "Hong Kong y los chinos protegían bastante a toda la gente. El centro de entrenamiento cerró y no tuvimos ningún entrenamiento normal y regular.

"Psicológicamente, los esgrimistas se sentían incómodos y frustrados con el entrenamiento y la participación en la competencia. Ése fue el principal problema".

Chung, que terminó 13ª en la categoría B individual femenina de florete y espada, y cuarta en las pruebas por equipos de florete y espada, coincidió: "Nos enfrentamos a una situación difícil antes de los Juegos Paralímpicos. Cuando nos preparábamos para Tokio 2020, aún dudaba de si podría ir a los Juegos. Pero en lugar de pensar en si podría ir o no, lo único que podía hacer era prepararme física y mentalmente.

"Por supuesto que es una lástima que no consiguiéramos medalla, pero ahora el entrenamiento es más normal y regular. Así que puedo centrarme más en entrenamientos específicos, por ejemplo para la columna vertebral y el movimiento del tronco (músculos centrales). Esta es la parte con la que antes tenía problemas. Intento encontrar mi punto débil y mejorarlo en cada competencia futura para conseguir una buena preparación para París 2024".

Revancha en París

A poco más de 500 días de los próximos Juegos, Hong Kong aspira a volver al podio.

"Cuando terminamos Tokio 2020, hicimos la cuarentena en Hong Kong y luego tuvimos una reunión por video en el hotel para repasar los Juegos Paralímpicos", dijo Chung. "El entrenador Wong nos preguntó qué pensábamos sobre nuestro futuro y qué queríamos mejorar. Habló con cada atleta para averiguar los puntos fuertes y débiles de cada uno, porque todos somos diferentes".

Karl Wong coincidió: "Después de Tokio, intentamos centrarnos profundamente en el entrenamiento individualizado de cada atleta.

"Irene se centra en el movimiento de su cuerpo; otros esgrimistas más en la sensibilidad del trabajo de brazos. Intentamos ser más específicos para cada persona y también hacer más análisis de los rivales, para saber cómo podemos hacerlo mejor.

"Participaremos en todas las Copas del Mundo para ganar experiencia y organizaremos algunos entrenamientos en el extranjero para inspirarlos a que mejoren su esgrima. No hicimos mucho de eso antes de Tokio".

En 2023, el equipo de esgrima, formado por 17 atletas, aspira a ganar puntos en la Copa del Mundo para clasificarse para París 2024 y competir en los Juegos Para Asiáticos de Hangzhou, China, en septiembre.

"Después nos centraremos en los diferentes niveles de los esgrimistas", dijo Wong. "Por ejemplo, la esgrimista de élite Alison Yu (Chui Yee Yu) puede tener más posibilidades de conseguir medallas individuales.

"Intentaremos ganar una medalla también en las pruebas por equipos en París, en florete femenino y espada".

Para Chung, una medalla sería el broche de oro a una carrera llena de alegrías en la esgrima.

"Si tengo éxito en París, sería como completar mi vida de esgrimista; me plantearía hacer otra cosa", dijo. "Compensaría el remordimiento de Tokio 2020".

Y aunque los esgrimistas en silla de ruedas no subieron al podio hace dos años, el interés por este deporte sigue siendo alto en Hong Kong, gracias a un hombre.

"Hay más ruido sobre la esgrima por la medalla de oro de Cheung Ka Long en los Juegos Olímpicos", dijo Chung. "Ahora nos ve más gente, pero esperamos que en su lugar se apunte más gente".