Ntando Mahlangu no tiene tiempo para festejar con exámenes por delante

No hay tiempo para que la estrella Paralímpica sudafricana Ntando Mahlangu celebre su doble medalla de oro en los Juegos Paralímpicos Tokio 2020. 

El joven de 19 años con doble amputación llegó a la meta para conseguir el oro en la final masculina de los 200m T61 con un tiempo de 23,59 segundos y completó un memorable doblete en el Estadio Olímpico el viernes, pero tiene que cambiar inmediatamente su enfoque a los estudios.

Mahlangu tiene sus exámenes de secundaria programados a partir de la semana que viene, y tiene el mismo interés en marcar el ritmo en sus estudios que en la pista.      

“Volveré a casa y me prepararé inmediatamente para mis exámenes. Tengo mis vacaciones solo en diciembre. Entonces, me tocan los exámenes finales de secundaria. Vuelvo el lunes y el martes rindo el examen hasta el 30 de septiembre”, dijo un exultante Mahlangu luciendo con orgullo su medalla. 

La estrella de “Rising Phoenix” continuó revelando que había viajado a Tokio con sus libros y que se esforzaba por equilibrar su tiempo sabiamente entre sus entrenamientos.

“He guardado mis libros en la Villa, pero no los he traído aquí. Cuando me presiono, creo que soy un chico bastante inteligente y por eso quiero obtener un buen resultado para asegurarme de que termino los estudios de la mejor manera posible. Desde el atletismo hasta los estudios, quiero dar mi cien por cien”, dijo Mahlangu, que sin embargo se asegurará de dormir con las dos medallas a su lado.

“Estoy muy emocionado, lo he conseguido y mientras sostengo la medalla me doy cuenta de lo que he hecho. Es una experiencia maravillosa, algo que había soñado. Soy un hombre feliz. Creo que el mejor momento es tener dos medallas de oro. Voy a disfrutar del momento cuando me vaya a la cama y ponga las dos medallas una al lado de la otra y duerma con ellas”, dijo Mahlangu, que saltó a la fama tras ganar una plata en Río a los 14 años.  

Mahlangu, que estableció un récord mundial en su camino hacia la medalla de oro en salto en largo al inicio de la prueba, era un claro favorito para la final de los 200m T61, tras haber establecido una marca mundial de 23,03 segundos en 2019.

“Creo que la medalla de oro en salto en largo disminuyó un poco la presión. Estoy agradecido por cómo se han desarrollado las cosas hoy. Este año ha sido muy bonito para mí, y ahora puedo mirar atrás y pensar en los buenos momentos”, dijo Mahlangu, que continuó revelando que tiene un gran número de fans desde el lanzamiento de Rising Phoenix y que, por lo tanto, estaba entusiasmado de cara a los Juegos.

“La gente empezó a reconocerme. Así que, al llegar a los Juegos Paralímpicos, había mucha gente que me apoyaba desde casa. El teléfono no para de recibir mensajes y la gente en casa está muy emocionada. 

“El objetivo al llegar a los Juegos Paralímpicos era mantener a la gente emocionada y tener un buen fin de semana para mí y también para la gente de Sudáfrica. Lo hice por la gente de Sudáfrica y estoy inmensamente feliz por ello”.

Mahlangu también alabó la actuación del veterano británico Richard Whitehead, que quedó en segundo lugar y que había vencido al sudafricano en Río 2016.

El corredor de 45 años iba al frente y le había sacado una buena diferencia a Mahlangu y al resto de los participantes. Sin embargo, Mahlangu superó al británico a 100m de la meta y al final consiguió una victoria convincente. Whitehead se conformó con la plata con un tiempo de 23.99s, seguido del alemán Ali Lacin con 24.64s.

“Creo que al llegar a los Juegos no se trataba de mí. Se trataba de representar a la clase T61 y lo llevé a otro nivel en el salto en largo. Hoy he corrido con Whitehead por última vez, y ha sido triste para mí. Las cosas llegan a su fin, pero tengo la suerte de que haya terminado así (con un triunfo)”.