Shunya Takahashi: Relajar para maximizar rendimiento

Shunya Takahashi, de 22 años, espera asegurarse un lugar en el evento de lanzamiento de jabalina F46 (discapacidad del miembro superior) en los Juegos Paralímpicos Tokio 2020.

Descubramos cómo su experiencia en el National High School Baseball Championship 2016 en Koshien despertó su fascinación por el deporte.

Del béisbol al atletismo

Takahashi tiene una discapacidad en su brazo derecho causada por la mielitis que tuvo a los tres años. Sin embargo, esto no le impidió dedicarse al béisbol cuando estaba en el segundo año de la escuela primaria. En el verano del tercer año de secundaria, participó en el campeonato nacional de béisbol en Koshien como miembro del equipo de la escuela secundaria de Sakai de la prefectura de Tottori.

Aunque no tuvo la oportunidad de jugar ningún partido durante ese campeonato, estaba orgulloso del riguroso entrenamiento que lo llevó a esa etapa de su carrera deportiva.

Takahashi dejó de jugar al béisbol después de la secundaria y estaba pensando en qué hacer cuando recibió una llamada de MITSUI Toshihito, el head coach del club atlético de la Universidad de Nihon Fukushi.

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Mitsui le propuso a Takahashi comenzar con el Para atletismo y aspirar a los Juegos Paralímpicos. Takahashi estaba al tanto de la existencia de los Juegos Paralímpicos, pero no sabía qué deportes estaban involucrados. Sin embargo, la oferta de Mitsui era demasiado tentadora para rechazarla en un momento en que buscaba un nuevo propósito en la vida. Decidió “intentarlo” y entró en la universidad.

De todas las pruebas de atletismo, al principio tenía en mente los 100 metros, pero después de comparar su nivel con el de los velocistas de primer nivel mundial, se decidió por el lanzamiento de jabalina porque pensaba que sería capaz de beneficiarse de los fuertes hombros que desarrolló gracias al béisbol.

Todo es cuestión de destreza

Sin embargo, su experiencia en el béisbol no se tradujo instantáneamente en el lanzamiento de jabalina.

Para empezar, una jabalina que se usa en el evento masculino mide alrededor de 2,6 a 2,7 metros de longitud y pesa 800 gramos, lo que no se parece en nada a una pelota de béisbol.

Al principio, Takahashi no podía lanzar la jabalina en línea recta y tenía dificultades para que se clavara en el campo. En el béisbol, sus lanzamientos largos habían alcanzado casi 90m, pero con la jabalina, solo podía lanzar unos 30m.

“La técnica requerida para lanzar una jabalina era completamente diferente. En el béisbol, se lanza la pelota delante de la cara, pero con la jabalina, se lanza por detrás de la oreja. La forma en que empujas el brazo al lanzar la pelota y la forma en que balanceas la cintura al batear son similares al movimiento del lanzamiento de jabalina, pero el resto era totalmente diferente, por lo que era extremadamente desafiante”, confesó Takahashi.

Takahashi solo podía lanzar y hacer caer la jabalina en distancias cortas, pero con el tiempo fue capaz de desarrollar su destreza y técnica para lanzar a grandes distancias.

Esencialmente, para ser capaz de lanzar distancias más largas y también para impulsar adecuadamente la jabalina en el campo, el lanzador necesita rotar su cuerpo mientras suelta la jabalina. Sin embargo, este es solo uno de los tantos pasos cuando se va a lanzar.

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La clave es relajar

El rendimiento de Takahashi empezó a mejorar después de conocer a su entrenador KUBO Koji durante su tercer año de universidad.

Kubo le enseñó la forma correcta de lanzar y lo ayudó a eliminar las altas tensiones que tenía en el codo. Hasta entonces, había sido propenso a las lesiones al igual que lo había sido como jugador de béisbol.

Al cambiar su forma, mejoró la calidad de su práctica. La marca personal de Takahashi también ha aumentado de los 30m iniciales a 58,98m. También ha aprendido a utilizar correctamente su fuerza, lo que ha contribuido en gran medida a ser capaz de lanzar más lejos.

“La parte más importante en el lanzamiento de jabalina es relajarse. Debes elegir conscientemente cuándo ejercer tu fuerza física y cuándo liberar la tensión. La fuerza debe aplicarse más cuando se suelta la jabalina, así que debes mantenerte relajado hasta ese momento crítico y ejercer tu máxima potencia en el instante en que lanzas”, explicó.

Para obtener el máximo rendimiento, se dice que la velocidad ideal de la carrera antes de lanzar la jabalina es de entre el 60 y el 70 por ciento de la velocidad máxima de los atletas. Estando de pie a 167cm y pesando 67kg, como Takahashi tiene una desventaja física en comparación con otros lanzadores de jabalina, ahora está trabajando para mejorar su velocidad de carrera.

Formación en la escuela secundaria

Cuando los registros mejoran hasta cierto nivel, el ritmo de crecimiento disminuye.

Así, los atletas de jabalina se someten a un incansable ciclo de prueba y error para romper su récord personal en incrementos tan pequeños como de 1cm. No siempre logran un nuevo récord en cada competencia; de hecho, es más probable que no lo hagan.

Takahashi confesó que hace un esfuerzo “agotador” para restablecer su récord. Sin embargo, también admite: “Me [siento genial] cuando rompo mi récord personal y me siento recompensado por haber trabajado muy duro. Es divertido cuando establezco un nuevo récord”.

Ahora que competir en los Juegos Paralímpicos Tokio 2020 está empezando a ser una realidad, ¿cuáles son los motivos de su crecimiento como atleta?

“Sobre todo, creo que debo mi crecimiento a los cimientos que construí durante la secundaria. En aquellos días, practicaba béisbol todo el día, lo que sentó las bases para que yo tuviera un solo objetivo. Además, haber estado en Koshien también me hizo más fuerte mentalmente. Estas experiencias me ayudaron a mantenerme motivado y llegar hasta aquí".

En la jabalina, Takahashi puede experimentar de primera mano el alcance de su desarrollo como atleta cuando logra un lanzamiento a una distancia más larga. La jabalina ofrece una fascinación única que difiere de la emoción que se obtiene con el bateo fino y la defensa en el béisbol.

“No es solo el talento natural lo que cuenta, sino más bien los esfuerzos realizados que dan como resultado el crecimiento”, que es otra característica cautivadora del deporte según Takahashi.

A pesar de que tiene que esperar para asegurarse una plaza, Takahashi aspira a ganar la medalla de oro en Tokio 2020 y ahora el joven atleta ve una clara imagen de sí mismo compitiendo en la cita Paralímpica, para sumar otro prestigioso título a su carrera deportiva.