Dai Tokairin: Cuaderno de positividad me lleva al éxito

A solo 200 días del inicio de los Juegos Paralímpicos, Dai Tokairin, Para nadador y poseedor del récord mundial, habla de sus preparativos para su debut Paralímpico en casa.

En el evento de Para natación celebrado entre el 7 y el 8 de noviembre de 2020, Dai Tokairin terminó la prueba de 200m medley individual masculino con un tiempo de 2:10.81.

Era la primera carrera del nadador japonés en 10 meses, y estaba nervioso antes de la partida.

“Estaba bastante nervioso antes de empezar la carrera, pero conseguí mantener la calma. Quizá no estaba al nivel mundial, pero lo acepté porque era demasiado optimista”, dijo, estando a más de dos segundos de su propio ritmo de récord mundial.

Sin embargo, “mantener la calma y un buen estado de ánimo” ha sido el lema de Tokairin desde que perdió su oportunidad de competir en Río 2016, a pesar de que se le consideraba una posibilidad de formar parte del equipo Paralímpico de Japón para esos Juegos.

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Aprendizaje de Río 2016

La prueba de clasificación de natación de Japón para Río 2016, celebrada en marzo, fue una competencia única para seleccionar a los miembros del equipo de los Juegos Paralímpicos. Todos los nadadores estaban nerviosos, abrumados por el ambiente porque era la única oportunidad de entrar en el equipo.

Para Tokairin, a quien se le diagnosticó una discapacidad intelectual leve (trastorno del espectro autista) a la edad de cuatro años, fue especialmente difícil mantener la calma ante una ocasión tan monumental.

“La gente de Yamagata, mi prefectura natal, me apoyaba, pero sentí que eso aumentaba la presión”, dijo el joven de 21 años. “Era la primera vez que iba a esa sede y todo era nuevo. No pude evitar preocuparme por las lesiones y las restricciones de la dieta”.

Apoyo de sus padres

Tokairin se ha convertido en un nadador seguro de sí mismo, especialmente ahora que ha sido capaz de encontrar la manera de lograr el equilibrio como atleta.

“Se trataba de controlar mi mente. Si hubiera podido hacerlo, no habría sido derrotado [en el evento de clasificación para Río 2016]”, pensó para sí mismo, sintiéndose decepcionado hasta el punto de querer dejar la natación.

Durante esta época de angustia, fueron sus padres quienes lo ayudaron.

Su padre le aconsejó que escribiera en un cuaderno todo lo que le saliera bien o de lo que se sintiera feliz, no solo en su vida como atleta sino también en su vida cotidiana.

“Seguí su consejo, pensando que escribir lo que hacía bien podría ayudarme a esforzarme de nuevo al día siguiente”, explicó.

“A medida que seguía escribiendo en el “cuaderno del éxito”, me volvía cada vez menos negativo y finalmente era capaz de afrontar los entrenamientos difíciles con un estado de ánimo positivo, incluso cuando tenía todo en contra”.

Mientras tanto, su madre lo tranquilizaba.

“Hablé con ella de todas mis preocupaciones hasta que me sentí mejor”, dijo.

“Les agradezco que estén siempre a mi lado y me apoyen constantemente. Les debo el haber podido trabajar duro”, expresó su gratitud a sus padres antes de agregar en voz baja: “Aunque puede que les haya causado problemas”.

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ⒸTokairin Dai

Un pase soñado a Tokio 2020 y un récord mundial

Después de tres años y medio, en septiembre de 2019, Tokairin que en aquel entonces tenía 20 años, tuvo la oportunidad de poner a prueba sus habilidades mentales en su primer Campeonato del Mundo, donde se reunieron muchos futuros atletas Paralímpicos de Tokio 2020.

A pesar de ir por detrás en la primera mitad de la carrera, pasó a ganar la medalla de oro en su prueba favorita: los 200m medley, manteniendo un estado mental equilibrado.

Al tocar la pared, no solo había conseguido un lugar para los Juegos Tokio 2020, vengándose por fin de su derrota en el evento de clasificación para Río 2016, sino que también había logrado un tiempo récord mundial de 2:08.16. En ese momento, Tokairin salpicó el agua con sus manos y levantó los brazos en señal de triunfo.

“¡Es una sensación fantástica!”, gritó en la entrevista posterior a la carrera.

“Había perseverado a través de un duro entrenamiento, mientras guardaba en mi corazón la amargura que había sentido cuando me perdí los Juegos Paralímpicos Río 2016, así que al principio, no podía creer que realmente me había ganado ese lugar soñado. Con el cálido apoyo de muchas personas, pude olvidar todas mis preocupaciones y correr con un alto nivel de confianza en mí mismo.

“Había planeado decir: ‘¡Es una sensación fantástica!’ si lograba un récord mundial. Siempre quise decir esta famosa frase que pronunció un antiguo campeón”.

Tokairin se refería a las famosas palabras que pronunció el legendario japonés KITAJIMA Kosuke, que se convirtió en el primer nadador japonés en ganar medallas de oro consecutivas en los Juegos Olímpicos: en los 100m y 200m braza masculinos en Atenas 2004 y Beijing 2008.

Después de que Tokairin se asegurara un puesto en el equipo nacional, el COVID-19 se propagó por todo el mundo, lo que provocó un aplazamiento de un año de los Juegos Tokio 2020.

Se pidió a los atletas que interrumpieran sus entrenamientos y se cancelaron los Campeonatos de Para Natación de Japón y otras competencias. A pesar de esta situación sin precedentes, Tokairin dice que ha sido capaz de mantener la calma sin perder el rumbo.

En cuanto a la técnica, ha estado trabajando para aumentar su fuerza muscular, mejorar su estilo de espalda y mejorar su estilo libre, la brazada en la que siempre había destacado, tanto en velocidad como en forma.

“Tengo confianza para competir en la prueba medley individual, pero a menudo me pasan en el tramo de espalda, así que estoy trabajando en ello. Tengo muchas ganas de mejorar mi técnica. Por muy difícil que sea, tengo un espíritu de lucha contra mis debilidades. Me digo: ‘¡Adelante!’”. dijo Tokairin mientras reía.

Agradecido por el apoyo que ha recibido

El año de los Juegos Paralímpicos Tokio 2020 ya está aquí. Dispuesto a competir en sus primeros Juegos, espera “disfrutar de las carreras”.

“Mi mayor objetivo es competir con mi propio estilo al máximo y darlo todo. Me gustaría nadar con agradecimiento en mi corazón por todo el apoyo que he recibido”, dijo Tokairin.

“La belleza de los Juegos Paralímpicos es que cada atleta, con su discapacidad distintiva y su aspiración única, da lo mejor de sí mismo y estira su potencial al máximo. He reafirmado que el verdadero valor de un atleta es alcanzar su máximo potencial”, añadió.

“Una medalla de oro cambia la vida. Por eso busco ganarla”.

Sin embargo, ser un atleta no significa ser bueno en todo. Tokairin conoce sus puntos débiles y revela sus preocupaciones: “Si no gano la medalla de oro, puede que deje de agradarle a la gente, lo cual es aterrador”.

No obstante, acepta el desafío porque cree que, aunque la posibilidad de ganar una medalla de oro sea solo del 0,1%, tiene el poder de cambiar su vida.

Tokairin desea transmitir a los niños con discapacidad el siguiente mensaje, que es un concepto que atesora desde hace años:

“Sé positivo, sonríe y disfruta. Cree en tus infinitas posibilidades y trabaja duro”. Él mismo está decidido a “disfrutar y nadar a mi manera” en el escenario Paralímpico.