Viaje de 30 años de Dinamarca a la historia del rugby en silla de ruedas 

Antes, el programa de rugby en silla de ruedas de Dinamarca era más sobre diversión. Entonces llegó Thor Johansson, añadió profesionalismo, y ahora la nación europea está lista para hacer historia en los Juegos Paralímpicos Tokio 2020. 

El jugador estrella Sebastian Frederiksen, quien se unió al equipo nacional en 2012, atribuye el éxito del programa a Johansson.

"No ha sido entrenador durante los últimos cuatro años, pero empezó el programa y jugó durante unos 20 años", dijo Frederiksen. "Cambió la forma de jugar y todo el compromiso del equipo. Antes de eso, se trataba más de diversión para el equipo, salir a los torneos y beber cerveza después de cada partido".

Dinamarca obtuvo su billete para Tokio 2020 a través del Campeonato Europeo 2019, quedando subcampeona de Gran Bretaña. Los daneses igualaron su mejor resultado en un europeo desde la edición de 2013. Ese momento en 2019 se construyó a lo largo de 30 años.

"Cuando (Johansson) llegó, se le ocurrió una forma más profesional de hacer las cosas. Hizo un gran negocio sobre cuánto teníamos que practicar y fijó algunos objetivos para lo que había que hacer para tener éxito", continuó Frederiksen. "Escuché historias sobre cómo jugaban antes y era un equipo para divertirse. Todavía lo hacemos por diversión ahora, pero también queremos ser los mejores del mundo y sentimos que nos estamos acercando".

El panorama general

Fue difícil encontrar mucha gente más feliz que Johansson cuando Dinamarca se abrió paso para clasificarse para Tokio 2020. Dejó el papel de entrenador principal tras el nombramiento del ex Paralímpico estadounidense Jason Regier en 2017. Desde entonces, Johansson dijo que ahora actúa como "sparring partner" de Regier y trabaja en el desarrollo de los jugadores y las tácticas.

"Cuando estás muy cerca de alcanzar un objetivo importante y luego te lo pierdes, por supuesto que te decepcionas", dijo Johansson sobre la derrota de Dinamarca ante Gran Bretaña. "Sin embargo, cuando el polvo se asienta y piensas en ello, Dinamarca ascendió a la cima del rugby europeo en sólo unos pocos años, y tal vez no teníamos el nivel de experiencia necesario en aquel entonces para cerrarlo en los últimos minutos".

Johansson y Torben Nygaard, quien también actuó un tiempo como entrenador jefe, hicieron su misión de convertir a Dinamarca en una fuerza competitiva.

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"Creo que todos tenían su corazón y su alma en el rugby en silla de ruedas y querían ganar", reflexionó Johansson. "Sin embargo, no había mucha estructura en la organización, y los roles y responsabilidades no estaban claros. Especialmente el equipo alrededor de los jugadores es crítico para permitir que los jugadores se concentren al 100% en su juego".

Johansson dijo que una parte clave del desarrollo de un equipo es la construcción de un verdadero programa que seleccione cuidadosamente a los especialistas que rodean al equipo. Todos ellos deben tener funciones, responsabilidades y objetivos claramente definidos. 

"Una vez que tienes eso en su lugar, se trata de crear una cultura ganadora, lo cual es más fácil de decir que de hacer", añadió Johansson. "Todas las personas son diferentes y nos impulsan cosas diferentes, reaccionamos de forma diferente a las cosas, algunos prestan atención a los detalles, otros no". 

La diversidad en el grupo pero con un objetivo colectivo común fue clave para llegar a Tokio, señaló Johansson.

Sin embargo, fue una montaña rusa.

Derrota se convierte en motivación

Frederiksen ha pasado por los altibajos del equipo, incluyendo la desgarradora derrota ante su rival escandinavo, Suecia, en el Europeo 2015 que les negó un puesto en los Juegos Paralímpicos Río 2016.

Pero fue una motivación para ellos de cara al Europeo 2019 en su país.

En esta ocasión, Francia les esperaba en la semifinal y, después de cuatro largos años sin participar en Río 2016, los daneses reservaron su plaza en Tokio 2020 con una emocionante victoria por 53-49 ante un público numeroso.

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"Fue la experiencia completa", recordó Frederiksen, quien jugó casi todos los minutos de esa semifinal. "Es increíble estar del otro lado llegando a los Juegos Paralímpicos ahora y estar seguro".

"Eso me ha motivado a mí y a los chicos mayores como (el capitán) Leon (Jorgensen) y a nuestros jugadores de bajo puntaje para la práctica, pero el día de la semifinal en los europeos, no estaba tan en mi mente".

"Algunos de los otros chicos conocían las estadísticas y en los últimos 10 partidos habíamos perdido siete contra Francia. Si hubiera pensado en eso ese día, probablemente me hubiera confundido, así que traté de mantenerlo alejado".

Gran Bretaña derrotó a Dinamarca por 55-45 en el partido por la medalla de oro.

"No está bien decirlo, pero eso es lo que pasó. Estábamos satisfechos con la clasificación, pero ahora tenemos que intentar trazar objetivos más grandes y alcanzar las estrellas", dijo.