Amor en el aire para la pareja de judokas Ben Goodrich y Nicolina Pernheim

Para dos judokas en los Juegos Paralímpicos la pandemia fue el empujón que necesitaban para hacer el emparejamiento de sus vidas.

El estadounidense Ben Goodrich y la sueca Nicolina Pernheim se conocieron durante una competencia en el Instituto de Judo Kodokan en Tokio en 2017 y empezaron a salir en 2018. Ahora están de regreso en Kodokan, la sede oficial de entrenamiento de judo en Tokio 2020, como experimentados atletas Paralímpicos y comprometidos.

Casi 8000km separaban a la pareja de judo internacional cuando comenzaban su relación a la distancia. Al azotar el Covid-19, el radicado en Colorado Goodrich descubrió que no solo extrañaba a su novia sino también sparrings con quienes entrenar.

“Judo es un deporte de contacto cercano, así que necesitas estar tocando a tu oponente, especialmente en el judo Paralímpico, y eso es exactamente lo opuesto de lo que estamos tratando de hacer con el covid”, dijo Goodrich.

“Fue definitivamente difícil entrenar por momentos. Durante algunos meses todo estuvo cerrado. No podías entrenar con otras personas. Como el boxeo de sombra, podías hacer sparring y agarres de sombra, pero no se logra demasiado con eso”.

“Así que pasé gran parte del año en Suecia donde tenían menos restricciones en cuanto al uso de mascarillas y poder entrenar en pequeños grupos, especialmente para integrantes del equipo nacional allá y gente en la élite”.

A pesar de una diferencia de casi 40kg en sus clases de peso, Goodrich y Pernheim a menudo se encontraban ayudándose mutuamente durante los entrenamientos de judo en Suecia.

“Se ha mudado a Suecia”, dijo Pernheim. “Desde navidad más o menos, hemos estado entrenando juntos. Él es -100kg, y yo soy 63kg. Así que mismo club, pero no los compañeros de entrenamiento más cercanos. Pero durante el Covid, a principios de la primavera, me permitieron entrenar con él pero con nadie más porque ya estábamos juntos”.

Entre agarres y caídas, Goodrich terminó con más que una compañera de entrenamiento.

“Le propuse matrimonio en diciembre del año pasado y planeamos tener una boda pequeña solo para la familia en enero por el Covid. Estamos tratando de poner eso en marcha, porque queremos empezar esa parte de nuestras vidas también”, dijo.

Goodrich terminó noveno en el evento de +100kg masculino en Río 2016, mientras que Pernheim fue quinta en Río 2016 y séptima en Londres 2012 en el evento -63kg femenino, y quinta en Beijing 2008 en la categoría -70kg femenina.

Pernheim estará en acción el sábado enfrentando a la ucraniana Iryna Husieva en cuartos de final de la B1. Por su parte, Goodrich competirá en la B2 contra Anatolii Shevchenko del CPR.

Habiendo quedado dos veces fuera del podio por un puesto, Pernheim está decidida a mejorar una posición en su cuarto Juego Paralímpico, ahora con la ayuda de su prometido.

“No quiero estar cerca. Quiero llevarme una medalla. Eso es lo que quiero, mucho”, dijo. “Y es bueno que los dos entendamos el deporte y cuán importante es en nuestras vidas, y priorizar el judo sobre lo social. Sería diferente si estuvieras con otra persona que no lo entendiera tanto”.