Lima 2019: Una pionera en deporte e inclusión

Alejandra Aybar haciendo historia para República Dominicana 03 Jul 2019
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A short stature woman standing in front of a swimming pool
La dominicana Alejandra Aybar participará de sus primeros Juegos Parapanamericanos en Lima
ⒸRicardo Piantini
By Teddy Katz | For the APC

Competir en los Juegos Parapanamericanos Lima 2019 no es algo que Alejandra Aybar, de 30 años, hubiese considerado posible ni en sus sueños más remotos cuando era niña.

Nació con una enfermedad genética o de huesos quebradizos llamada osteogénesis imperfecta, que afecta su equilibrio. Se fracturó tantas veces el fémur y la cadera que ya perdió la cuenta.

Aybar tuvo que soportar terribles dolores e innumerables cirugías por lo que la mayor parte de su vida practicar deporte estaba fuera de sus posibilidades.

En 2015, tuvo nuevamente una fuerte caída que causó daños irreparables en su rodilla derecha.

El doctor le prescribe natación

Estando postrada en su cama del hospital, su doctor le aconsejó empezar a nadar para que sus huesos se hicieran más fuertes.

Pero en el área de donde ella proviene en República Dominicana no hay piscinas, por lo que nunca había podido aprender a nadar.

Viviendo en la capital Santo Domingo en 2015, empezó a concurrir al Centro Olímpico para tomar clases. Pero al principio no le permitían entrar a la piscina. Después de protestar, le ofrecieron una hora los viernes.

“Era difícil para mi aprender porque me trataban como a una bebé”, dijo Aybar.

Se rehúsa a tomar un “no” como respuesta

Ella volvió a hablar con las autoridades que dirigían el Centro y les pidió permiso nuevamente. Le permitieron practicar dos horas a la semana.

En ese momento es cuando empieza a progresar y, transcurrido un año, ya entrenaba con el equipo convencional todos los días.

El deporte le dio confianza y un propósito que dijo no haber tenido nunca antes.

Nadar es “libertad”

“Cuando siento el agua, siento libertad. Puedo ir cada vez más rápido sin un bastón o sin nadie que me ayude.” Y agregó: “Es como mi paraíso personal".

Notó que era una alumna rápida y, en el lapso de dos años, Aybar compitió en su primer torneo internacional en la World Series de Indianápolis.

Eso resultó ser un importante punto de inflexión.

El apoyo de la Fundación Agitos

Aybar recibió una invitación de la Fundación Agitos para competir en el Campeonato Mundial de Para Natación Ciudad de México 2017 como única integrante del equipo femenino de República Dominicana.

Ese evento fue memorable por otra razón. Ella se convirtió en la primera Para nadadora de su país en competir en una final de un Campeonato Mundial.

“No fui consciente de eso hasta que el comentarista dijo ‘esta es la primera vez que tenemos a alguien de República Dominicana compitiendo en la final’. Yo no sabía que estaba haciendo historia".

Alejandra continuó haciendo olas el pasado abril, convirtiéndose en la primera nadadora de su país en la historia en clasificarse a los Juegos Parapanamericanos.

“Me siento muy feliz, no sólo por ser la primera sino porque estoy escribiendo un nuevo capítulo en el deporte Paralímpico en mi país".

Hizo todo esto en solo cuatro años, trabajando nueve horas por día como ingeniera industrial para pagar las cuentas mientras se entrenaba.

Ayudando a otros

“Creo que lo que estoy haciendo, incluso si gano una medalla, es ayudar a otros. Y esa es la mayor satisfacción que una persona puede tener".

Aybar recibe mensajes diariamente de personas a las que ella inspira. Muchos empezaron a ejercitarse después de ver lo que ella había sido capaz de lograr. Algunos jóvenes Para nadadores empezaron a entrenarse en este deporte.

Su gran meta es crear conciencia acerca de la inclusión en su país en diferentes niveles: deporte, empleo, igualdad social y derechos.

Hay mucho trabajo por hacer en su país, según dice, donde conductores no bajan la velocidad cuando ella quiere cruzar la calle y mucha gente la mira raro.

“Cuando las personas me ven, me miran como si estuvieran mirando algo diferente, como un extraterrestre”.

Empoderamiento femenino

Un poderoso banco en República Dominicana le pidió a Aybar que sea modelo para una nueva campaña publicitaria acerca de la accesibilidad. Con sólo 1,31m de estatura, ella no puede mirar al cajero a los ojos, con lo cual el banco está renovando para hacerlo accesible para todos.

Apoyó una campaña de inclusión global llamada Show Us (Muéstrennos) con Dove, Getty Images y GirlGaze, que promueve el empoderamiento femenino. Aybar dice que el deporte le enseñó a amar y abrazar sus diferencias.

“Ahora amo cómo me veo. Amo mis pocos músculos y sé que Dios tiene un propósito para mí".

“No estoy segura de que la gente haya cambiado (cómo me ven) pero la que realmente cambió soy yo. Ya no me importa si la gente me mira. Me siento empoderada”, agregó.

Aybar espera usar ese nuevo poder para llegar a la final en Lima y demostrar que está entre las mejores nadadoras del continente.