Talento adolescente y veterano en Juegos Paralímpicos, garantía de titulares

La edad es solo un número, dice el refrán. Sin embargo, la etiqueta de "más joven" o "más veterano" sigue ejerciendo una fascinación instantánea cuando se asocia a un perfil deportivo.

Por un lado, el joven precoz que compite con rivales experimentados y genera grandes expectativas.

Por el otro, los "mayores" que desafían a los años y siguen forzando sus cuerpos en unos Juegos Paralímpicos tras otros.

Los libros de récords esperan para anotar las hazañas de estos increíbles Para atletas y su eventual lugar en el salón de la fama Paralímpica. Sin embargo, hay dos que se destacan por sí solas: la Para tenista de mesa Natalia Partyka y la Para tiradora Libby Kosmala.

A los 11 años, la mayoría de los niños no miran más allá del colegio, los juguetes y una discusión con sus padres sobre la hora de acostarse, pero Partyka nunca se ha conformado. Al contrario, en 2000 se subió a un avión rumbo a Sídney con sus compañeras polacas y se convirtió en la atleta Paralímpica más joven de la historia.

Partyka, que nació sin mano ni antebrazo derechos, empezó a jugar al tenis de mesa a los siete años. En Atenas 2004 se convirtió en la Para jugadora de tenis de mesa más joven en ganar una medalla de oro Paralímpica.

Partyka, seis veces medallista de oro, siguió haciendo historia al competir tanto en los Juegos Olímpicos como en los Paralímpicos 2008 (Beijing), 2012 (Londres) y 2016 (Río). Su nuevo objetivo es hacer el doblete en París 2024.

"En Tokio perdí en semifinales (individual femenino clase 10). Por mi ambición, eso me preocupa. Quiero compensarlo", dijo.

I will definitely try to qualify for the Paralympics and the Olympics in Paris – Natalia Partyka

La australiana Kosmala, que compitió en los Juegos Paralímpicos Río 2016 con 74 años y se retiró en 2020 con 78, ocupa la primera posición en la categoría de "más veterana".  Es parapléjica por complicaciones de nacimiento.

Kosmala compitió en 12 Juegos Paralímpicos y ganó 13 medallas para Australia, nueve de ellas de oro. La primera fue en Toronto 1976 (tiro con rifle mixto 2-5), después de haber ganado un bronce en natación (relevo femenino 3x50m combinado) cuatro años antes, en Heidelberg 1972.

La última fue en Río 2016, cuando finalmente reconoció que su etapa como tiradora internacional llegaba a su fin.

"No tiré bien (en Río) y no sabía por qué. Estaba realmente en la cima del árbol antes de ir a Río", dijo a Shooting Australia.

Kosmala sigue tirando a nivel local, ejerce de mentora y ha sido incluida en el Salón de la Fama Paralímpica Australiana.

Su legado está asegurado, al igual que el de Partyka, pero en el otro extremo del espectro.

If you are still able to hold the rifle without any tremor, and you can still see well, you can still shoot very well – Libby Kosmala

Más revolucionarios

Sin embargo, tanto Partyka como Kosmala no son las únicas que han superado los límites de la edad. Cada dos Juegos Paralímpicos de Verano y de Invierno hay un adolescente o un veterano que acapara titulares por la extraordinaria proeza de rendir en deportes de élite a edades tan tempranas o curtidas.

Husnah Kukundakwe, de Uganda, fue la atleta Paralímpica más joven en Tokio 2020, con 14 años. A pesar de su corta edad, la Para nadadora ya ha visto cómo el deporte ofrece oportunidades, esperanza y un cambio de mentalidad.

La adolescente, que nació con una discapacidad en una extremidad, compitió en la prueba femenina de 100m braza SB8 y su actuación fue transmitida a África.

"La mayoría de los padres (de Uganda) que dan a luz a niños con discapacidad los abandonan. A veces acaban en la calle, se convierten en mendigos", dijo tras su actuación.

"Quizá si ellos (los padres) ven los Juegos Paralímpicos, se den cuenta de que la decisión que tomaron es realmente mala".

I am a Paralympian and I feel I could touch the clouds - Husnah Kukundakwe

Por su parte, Ben Tudhope nació con parálisis cerebral. A los 14 años, el australiano fue el competidor más joven en los Juegos Paralímpicos de Invierno Sochi 2014 cuando compitió en Para snowboard cross.

Hoy en día puede describirse a sí mismo como un ex niño prodigio, tres veces Para snowboarder Paralímpico y medallista de bronce (snowboard cross SB LL2) en Beijing 2022. 

"Nunca pensé que hoy estaría en este momento y mira dónde estoy", dijo Tudhope tras ganar su medalla.

Por otro lado, el competidor de más edad en Sochi 2014 fue el canadiense Jim Armstrong, el capitán de 63 años del equipo de curling en silla de ruedas.

El dentista retirado llevó a Canadá a ganar su tercer oro consecutivo en los Juegos Paralímpicos, al tiempo que se colgaba el segundo.

If there is any kid out there with cerebral palsy, with a disability, you can achieve anything – Ben Tudhope

El curling en silla de ruedas produjo otro atleta "más viejo" en Beijing 2022. La doctora Pam Wilson, especializada en rehabilitación pediátrica en los Estados Unidos, empezó a practicar este deporte hace diez años, a los 56 años.

Wilson, que sufrió una lesión medular tras un accidente de coche, buscaba un nuevo reto deportivo y a los 66 años no hay ninguno mayor que participar en unos Juegos Paralímpicos.

"El curling es uno de esos deportes de habilidad", dijo Wilson. "Es físico, pero sin duda es un deporte en el que mejoras con cada piedra que lanzas".

You get better with every rock you throw– Pam Wilson

Más recientemente, la promesa austriaca del Para esquí alpino Elina Stary fue la atleta más joven en Beijing 2022. Por entonces tenía 15 años. La joven, que estudia turismo, tiene una discapacidad visual por albinismo ocular.

Stary terminó cuarta y sexta en slalom y slalom gigante en Beijing.